Existe una conexión entre la historia de Venecia y la de Constantinopla, la antigua capital del Imperio bizantino en Oriente que se ha convertido en la moderna Estambul en Turquía y cuya población provenía en gran parte desde la moderna Grecia. Después de la famosa Cuarta Cruzada de 1204, durante la cual los venecianos se apoderaron de la mayoría de las riquezas y de los tesoros de Constantinopla, el Imperio bizantino empezó su caída y muchos griegos emigraron hacia el oeste, sobre todo hacia la rica Venecia. En el siglo XVI más de cuatro mil griegos de la iglesia ortodoxa vivían en la ciudad manteniendo su idioma, religión y tradiciones, razón por la cual el Estado de Venecia permitió la construcción de iglesias ortodoxas como San Giorgio dei Greci, San Jorge de los griegos. Parece que el campanario fuera inclinado ya desde su construcción.