Ahora estás caminando por Riva degli Schiavoni, la orilla de los esclavos, que se refiere a los mercaderes eslavos procedentes de los Balcanes que trabajaban aquí cuando Venecia era en el periodo de su máximo apogeo. Hasta hace trescientos años atrás habrías visto muchos barcos mercantes atracar aquí y descargar su mercancía, pero todo esto terminó con la invasión de Napoleón a principios del siglo XIX. En 1866, cinco años después de la unificación de Italia, Venecia se incorporó al Reino de Italia y en Riva degli Schiavoni se construyó una estatua del Rey Vittorio Emanuele II, el primer Rey de Italia conocido también como el “caballero” por su personalidad honesta y honrada.
En uno de los lados de la base de la estatua hay una mujer que representa a Venecia derrotada con el León alado que muerde las cadenas, las cuales son el símbolo del dominio de los Austrias.
Al otro lado de la base de la estatua se repiten las figuras de mujer y león, pero con una actitud ganadora debida a la dominación del Reino de Italia.