Enfrente de la Iglesia de San Juan y San Pablo verás la estatua ecuestre dedicada al general Bartolomeo Colleoni y realizada por el escultor de Florencia conocido como Verrocchio, maestro del joven Leonardo da Vinci. Se trata de la primera estatua en la historia que representa a un caballo con una pata en el aire, una imagen muy difícil de esculpir por sus proporciones y por la necesidad de mantener el balance de una estatua tan pesada sobre sólo tres apoyos.
Cómo Colleoni había dedicado su vida a luchar en defensa de los venecianos, el Estado le permitió elegir cualquier lugar para su entierro y al final el héroe expresó su voluntad de ser enterrado frente a San Marcos. No hay duda de que él se refiriera a Plaza de San Marcos, pero el Estado decidió enterrarle aquí frente a la Escuela Grande de San Marcos porque no solía aceptar muestras de poder o celebraciones de carácter individual. El único poder admitido era lo de la ciudad.