Este es el Campo Sant’Angelo, una de las pocas plazas con dos pozos, ambos del siglo XV. Aquí en su día hubo una iglesia dedicada al Arcángel Miguel, que sería destruida por Napoleón en los primeros años del siglo XIX. Un precioso cuadro del pintor veneciano Canaletto representa el ‘campo’ con la iglesia y su campanario, este último todavía existente. En una esquina de la plaza, encontrarás también la pequeña iglesia de Sant’Angelo Degli Zoppi o de los cojos, que era utilizada como capilla de oración.